• Santos católicos que celebran su día el 28 de marzo:

- En el Almanaque Cubano de 1921:

Santos Sixto, papa, Castor y Doroteo, mártires y Santa Fortunata, virgen

- En el Almanaque Campesino de 1946:

Santos Juan Capistrano, confesor Sixto, papa, Castor y Doroteo, mártires y Santa Fortunata, virgen

El 28 de marzo en la Historia de Cuba

• 1897 -

- Desembarcó el “Monarca” en la playa de Mosquitos, entre Mariel y Habana. Esta expedición estuvo al mando de los coroneles Federico Pérez Carbó y Rafael Armas Montenegro, secundados por el comandante André, con porque y voluntarios.

• 1873 -

- Integridad Española y Revolución Cubana.

Emeterio S. Santovenia en “Un Día Como Hoy” de la Editorial Trópico, 1946, páginas 181-182 nos describe los acontecimientos del 28 de marzo de 1873 en la Historia de Cuba:

   “El error capital de España en el largo, complicado y sangriento problema de la independencia de Cuba consistió en el concepto abstracto que llevó aquello de integridad racional o integridad patria. Los hombres representativos de la Metrópoli se encastillaron en el absurdo de que era menester conservar a toda costa su dominación en esta Antilla. No quisieron pensar en una solución, digna para todos y para todos beneficiosa, sobre la base del reconocimiento de un estado, independiente y libre, en la Isla. La obstinación en tan equivocado criterio apenas tuvo un intervalo de lucidez. Monárquicos y republicanos, en su inmensa mayoría, discurrían allá de igual manera respecto de la cuestión cubana. Por conocer esta realidad, los libertadores en armas, en documento suscrito en febrero de 1872, dijeron a los directores del Partido Republicano de España:

   “"Muchos de nosotros aprendimos en vuestras aulas universitarias cuán absurdo es el derecho de conquista; y el conocimiento que a nuestro ánimo llevaron vuestras brillantes lecciones disipó las dudas que mil veces nos asaltaron sobre la razón que hubieran tenido los españoles para privarse de la difusión de luces que la civilización arábiga esparciera por toda España durante la larga dominación sarracena, expulsando los moros de su territorio. Tuvieron los españoles razón para hacer lo que hicieron; que nunca el derecho de la fuerza podrá ser aceptado por código alguno.

   “"Si concebimos nosotros la inmarcesible gloria que cupo a España por el descubrimiento de las Américas, es porque no lo consideramos como un hecho aislado, sino porque para nuestra razón esa gloria no se explica sin actos posteriores.

   “"Efectivamente, el mayor timbre, el más preclaro título que a la admiración del Antiguo Mundo y a la gratitud del Nuevo una potencia conquistadora puede ofrecer es, como Inglaterra, hacer libres, dar existencia propia e independiente, a los pueblos a quienes primero prestó su civilización, religión e idioma."

   “Los términos del alegato de los patriotas eran categóricos y convincentes. ¿Pensarían ellos que iba a ser aquél bastante eficaz para conmover a los sostenedores del régimen democrático en España?

   “La apreciación del problema cubano estaba allá erigida en sistema común a todos los partidos. El contenido de las instrucciones reservadas que en 28 de marzo de 1873 fueron comunicadas por el ministro de Ultramar al capitán general de Cuba constituyó prueba plena de que en España, en la situación republicana lo mismo que en la monárquica, el falso concepto de la integridad de la patria continuaba frente a la revolución cubana. En aquel documento se expresó que la República estaba legítimamente proclamada en la Península. Y también allí se declaró, de manera formal y casi solemne, que para el nuevo gobierno, para el gobierno de la República, nada había superior o igual a la integridad patria, traducida entonces en el mantenimiento de la servidumbre política de Cuba.”