• Santos católicos que celebran su día el 17 de febrero:

- En el Almanaque Cubano de 1921:

Santos Silvio y Alejo Falconeri, confesores y San Julián de Capadocia

- En el Almanaque Campesino de 1946:

Santos Silvio, confesor y Rómulo, mártires, Julián de Capadocia y Santa Beatriz, virgen

El 17 de febrero en la Historia de Cuba

• 1907 -

- Falleció en La Habana Francisco Javier Balmaseda, natural de San Juan de los Remedios, Las Villas. A principios de la Guerra de los Diez Años, 14 de febrero de 1869, fue arrestado y enviado a la cárcel africana de Fernando Poo por el gobierno español junto con otros remedianos. Balmaseda fue uno de los pocos dichosos que lograron escapar de la terrible prisión. Una vez en los Estados Unidos redactó sus tristes experiencias, “Los confinados a Fernando Poo e impresiones de un viaje a Guinea”. Regresó a Cuba y durante la República sirvió a la patria desempeñando obligaciones civiles.

• 1896 -

- Antonio Maceo y sus tropas acamparon cerca de San José de las Lajas.

- José Miró Argenter en “Cuba Crónicas de la Guerra (La Campaña de Occidente) - Tomo II: Segunda Edición” de la Editorial Lex, 1942, página 68 describe los acontecimientos del 17 de febrero de 1896 en la Historia de Cuba:

   “La excursión del día 17 nos colocó en el centro de la provincia, a cinco leguas de la capital. Cruzamos impunemente las calzadas de Managua y de Güines, sorprendiendo innumerables vehículos que iban cargados de víveres para el mercado de la Habana. Los soldados de Wéyler no se veían por aquellos contornos. Situado el Cuartel General en el ingenio Santa Amelia, inmediato a San José de las Lajas, tuvimos ocasión de apreciar el estado de la opinión pública en la capital de la isla desde la llegada de Wéyler. El pánico se había apoderado de la gente pacífica, en tanto que el entusiasmo corría parejas con el regocijo en el bando español y en el elemento militar, cuyas aspiraciones eran comunes y por igual ardientes. Tres bandos acababan de publicarse en la Gaceta oficial: por uno de ellos se disponía que fuesen sometidos a la jurisdicción de guerra los inventores y propaladores de noticias favorables a la rebelión, así como las que comunicasen informes referentes a la guerra que deprimiesen a las fuerzas españoles o ensalzaran al enemigo. Otro de los bandos ordenaba la reconcentración de los habitantes de Sancti Spíritus, Puerto Príncipe y Santiago de Cuba, medida que terminaba en el plazo de ocho días, y por la misma disposición se ordenaba el desalojo de los establecimientos situados en la campiña. Por el tercer bando delegaba el gobernador general todas las atribuciones judiciales que le competían en los comandantes jefes de los cuerpos primero y segundo y en el de la tercera división o sea la de Camagüey, mandando que los prisioneros que se hicieran en acción de guerra fuesen sometidos a procedimiento sumarísimo, sin ejecutarse ninguna sentencia de muerte mientras no hubiese acusado recibo de ella el gobernador general. "Estos bandos -decía la prensa servil- han sido bien acogidos por la opinión pública". Las cárceles y fortalezas iban en breve a llenarse de sospechosos, a los que sería indispensable dar salida para que otros ingresaran, operaciones de carga y descarga, las dos facilísimas por el procedimiento usual de encarcelar cubanos sin causa justificada, y darles pasaporte para el otro mundo sin llenar el expediente de la instructiva ni el de la sentencia.”

• 1867 -

- Un Voto de Pozos Dulces.

Emeterio S. Santovenia en “Un Día Como Hoy” de la Editorial Trópico, 1946, páginas 101-102 nos describe los acontecimientos del 17 de febrero de 1867 en la Historia de Cuba:

   “La Junta de Información convocada por real decreto de 25 de noviembre de 1865 dio oportunidad a que los cubanos considerasen innecesario esgrimir las armas para lograr el reconocimiento de derechos por espacio de largos años inútilmente demandado de la Metrópoli. Los reformistas estaban animados del noble deseo de evitar nuevos derramamientos de sangre en el suelo patrio. Eran hombres de indiscutibles prestigios intelectuales y morales. Su conducta debía haberse interpretado por los usufructuarios del régimen colonial como el más sincero de los esfuerzos encaminados al mantenimiento de la paz en la Isla.

   “Las sesiones de la Junta de Información se iniciaron en Madrid en 1866, casi al cabo de treinta años de hallarse Cuba privada de representación legal en la Metrópoli. Lo que durante esos seis lustros había sido negado a la Isla -las falazmente prometidas leyes especiales necesarias para reparar la privación de las prerrogativas constitucionales de que la Península gozaba- se creyó entonces que sería otorgado. Pero vanas e ilusorias fueron las esperanzas del cubano en ese momento histórico. La Metrópoli, como respondiendo al clamor del país, había llamado a los representantes de éste a la Corte.

   “El real decreto de 12 de febrero de 1867, modificativo del sistema tributario de la Isla, entraño de consuno la renovación de los azotes administrativos sufridos por Cuba y el desprecio para los comisionados antillanos. La protesta no podía hacerse esperar, y el conde de Pozos Dulces fue el encargado de condensarla en un voto, el 17 de febrero de 1867 presentado, sobre la actitud que debían observar los Comisionados.

   “"En concepto del que suscribe -aseveró el esclarecido cubano-, los Comisionados deben protestar de una manera respetuosa, pero enérgica, contra las disposiciones del Real Decreto, por los perjuicios de gran cuantía que han de causar en la riqueza de aquel país, y por la alarma y el descontento que van a suscitar en todas las clases de la población; con tanta más razón cuanto que se han decretado inmediatamente después del informe razonado y documentado en que, así ellos como los demás individuos que el Soberano les ha asociado para ilustrarlo sobre las necesidades y conveniencias de Cuba, consignaron una opinión unánime y en sentido muy diverso a la vez que verdaderamente favorable para los intereses de aquella Isla y de su Metrópoli. Y urge que no se pierda tiempo en hacer la indicada exposición, porque-en el preámbulo del Real Decreto se alude dos o tres veces al informe de los Comisionados en términos que pudieran hacer extensiva a ellos la responsabilidad de medidas que ciertamente no han aconsejado."

   “De la conducta levantada que los cubanos siguieron en aquellos días difíciles fue hermoso ejemplo el voto formulado por Pozos Dulces el 17 de febrero de 1867. Mas Cuba estaba a la sazón condenada a recibir nuevos agravios de la Metrópoli, y España se hallaba predestinada a precipitar por sí misma su ruina colonial. La voz de los previsores y sensatos se perdió ante la perniciosa obstinación de la turba de funcionarios, monopolizadores y traficantes que pensaba que por entero le pertenecía el explotado país para entregarse en él a todo genero de abusos. La hora del desengaño final iba aproximándose. Ciertamente, los gobernantes españoles no querían evitar las amarguras y tristezas de una guerra.”

• 1860 -

- Se celebró la apertura del Liceo Artístico y Literario de la Ciudad de Matanzas.

• 1767 -

- Por Real Decreto de esta fecha de Carlos III ordenó la expulsión de los Jesuitas, firmado de su mano, que mandó al Conde de Aranda, confiándole su ejecución, exponiendo que los bienes temporales que la Compañía poseía en los dominios de España fuesen aplicados al fisco. Y el día 1º de abril se dio cumplimiento al Real Decreto.

• 1567 -

- De las “Actas Capitulares del Ayuntamiento de La Habana” Tomo II 1566 - 1574, dirigida por Emilio Roig de Leuchsenring, Municipio de La Habana, Administración del Alcalde Dr. Antonio Beruff Mendieta, editada en 1939, páginas 40-42.

   “En la villa de San Cristobal de la Habana á diez é siete dias del mes de Febrero de mil é quinientos é sesenta é siete años se juntaron á consulta é cabildo segun que lo han de uso é costumbre conviene á saber el Ylustre Señor Garcia Osorio Gobernador y Capitan General por Su Magestad desta isla de Cuba y los Señores Antonio de la Torre A Juan de Ynestrosa é Diego Lopez Duran é Diego de Soto regidores desta villa en presencia de mi el escribano de yuso escrito é lo que se trato en el dicho cabildo es lo siguiente.

   “En este cabildo trato su merced del dicho Señor Gobernador con los dichos Señores regidores que ya saben como Su Magestad mando al adelantado Pedro Menendez de Avilés que enviase á este puerto para la defensa de él alguna gente de guarnición de la que Su Magestad le envió para el socorro de la Florida é que al presente el dicho adelantado está en este pueblo é puerto con la dicha gente é que habiendole pedido el dicho Señor Gobernador que le entregue la dicha gente para desde luego poner en orden todas las cosas necesarias que convengan para la defensa desta tierra á lo cual el dicho adelantado ha respondido que deja dos cientos hombres é por capitan dellos á Baltazar de Barrera é que habiendo visto el dicho Señor Gobernador lo que Su Magestad manda acerca desto ha hecho sobre ello al dicho adelantado ciertos requerimientos los cuales con las respuestas de ellas mando á Alonso Centeno escribano ante quien pasaron lo lea y relate todo en este cabildo el cual lo leyó é habiéndose leido, el dicho Señor Gobernador dijo que los Señores Regidores traten sobre esto lo que vieren é mas conviene al servicio de Su Magestad é sosiego y pacificacion desta tierra.

   “E luego el Señor Antonio de la Torre habiendo visto lo dicho é tratado por su merced del dicho Señor Gobernador como de suso se contiene: dijo que le parece ser cosa conveniente al servicio de Su Magestad é bien desta villa é quietud de los vecinos della é para defensa de la tierra que los dichos doscientos soldados queden debajo de la bandera del Ylustre Señor Garcia Osorio Gobernador desta Ysla por Su Magestad que no á cargo de otro capitan ninguno forastero porque de quedar con el Señor Gobernador estarán siempre mas aparejados para la defensa deste puerto é tierra como lo están los vecinos é no se atreveran á hacer desconcierto ninguno é que esto es su parecer é voto é firmolo de su nombre. Antonio de la Torre.

   “El dicho Juan de Ynestrosa regidor perpetuo desta Ysla dijo ... pueblo é vecinos de él a ... biran bien y merced con.. Su Magestad ha mandado hacer á este puerto y ansi le parece que sobre ello debe servir á Su Magestad, y en cuanto á lo que el Señor Gobernador ha propuesto, al dicho Juan de Ynestrosa, le parece que esta republica estará mas quieta y pacífica estando los vecinos y soldados debajo de un Gobierno y que no quede con ellos otro Capitan mas, de solo el dicho Señor Gobernador por que habiendo Capitan que rija y gobierne los dichos soldados habrá siempre revueltas y disensiones y estando todos debajo de un capitan se escusará lo susodicho y de esto Su Magestad será mas servido porque estando los vecinos y soldados conforme y debajo de una disciplina con mas voluntad defenderán esta tierra é que esto le parece que se pida é diga por escrito al Señor adelantado Pedro Menendez de Aviles é firmolo.- Juan de Ynestrosa.

   “El dicho Diego de Soto regidor dijo que le parece que para pacificacion de esta tierra y servicio de Su Magestad no es cosa que conviene que quede capitan ninguno en esta villa con los soldados que quedaren, sino que queden debajo de la mano y dominio del Señor Gobernador por que le parece que habiendo dos mandadores habrá muchas diferencias é pendencias entre los soldados é los vecinos lo cual se escusará quedando debajo de la mano del Señor Gobernador y que esto es lo que le parece que conviene al servicio de Su Magestad é firmolo.- Diego de Soto.

   “El dicho Señor Diego Lopez Duran regidor desta villa dijo que Su Magestad hace gran merced en el socorro é guarnicion de soldados que manda poner en este puerto para la defensa de él y de los vecinos y en cuanto á dejarlos el dicho Señor adelantado Pedro Menendez de Aviles como Su Magestad le manda dice que su parecer é voto del dicho Señor Diego Lopez regidor es que todos los dichos soldados queden debajo del dominio é mando del Señor Gobernador Garcia Osorio Gobernador desta Ysla porque quedando ansi debajo de su mano se podrá defender este puerto haciendo el dicho Señor Gobernador un cuerpo de ellos y de los vecinos ó dividiendolos en tiempo conveniente y de necesidad y si queda otro capitan con cachos soldados está claro que no asertará y habrá escándalos y pendencias en este pueblo de lo cual Dios nuestro Señor y Su Magestad serán deservidos por lo cual le parece y vota lo que dicho tiene é firmolo.- Diego Lopez Duran.

   “Los cuales dichos votos los dichos Señores Regidores votaron de por si apartadamente ante mi el escribano de yuso escrito de que doy fé é pasó ante ni¡-Francisco Perez de Borroto escribano público y cabildo.

   “E visto por su merced del dicho Señor Gobernador y Regidores los votos y parecer de suso declarado acordaron que se ordene un pedimento y requerimiento conforme á los dichos votos é parecer por el cual pidan al dicho adelantado que entregue los dichos doscientos hombres al dicho Señor Gobernador é que no deje con ellos capitan alguno como dicho tiene é que todos cuatro regidores vayan con el escribano de cabildo á notificarle el dicho escrito é sobre ello le digan lo que conviene á la defensa deste puerto bien é pacificacion de los vecinos desta villa é firrnaronlo.- Garcia Osorio.- ... Torre.- Juan de Ynestrosa.- Diego de Soto.- Diego Lopez Duran.”