8 de Enero |
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Parque Central de Florida, Camagüey |
• Santos católicos que celebran su día el 8 de enero: |
- En el Almanaque Cubano de 1921: |
Santos Severino y Teófilo, diácono |
- En el Almanaque Campesino de 1946: |
Santos Severino, Teófilo, Eladio y santa Gúdula, virgen |
• Natalicios cubanos: |
Coronado, Francisco de Paula: -Nació en La Habana el 8 de enero de 1870. Licenciado en Derecho
Civil y doctor en Filosofía y Letras. Miembro de la Academia de la Historia desde la fundación. Correspondiente de la Española de la Lengua, Director de la Biblioteca Nacional, crítico, historiador, bibliófilo y bibliógrafo. Ocupó altos puestos en la administración, singularmente en el ramo escolar, y también en el cuerpo diplomático. Dio conferencias a maestros y obreros, escribió versos y colaboró en periódicos, sin olvidarse de fundar algunos. Revolucionario de la Guerra de Independencia, en que formó parte de la Delegación de Nueva York y redactor de “Patria”, actuando con dinamismo y sentido sin igual. Corresponsal y colaborador de varios periódicos. |
El 8 de enero en la Historia de Cuba |
• 1896 - |
- La Invasión Libertadora entra en Pinar del Río: Avanza de Maurín a Vergel, en total 5 leguas recorridas.
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- Penetran las fuerzas de Antonio Maceo en la Provincia de Pinar del Río. |
- Adolfo Dollero en “Cultura Cubana (Pinar del Río)”, Imprenta de Seoane y Fernández, La Habana, 1921, página 78: Antonio Maceo entra en la Provincia de Pinar del Río: |
“El verdadero inicio de la campaña Vueltabajera, la más activa de toda esa guerra de independencia, fue el día 8 de Enero de 1896, y la primera fase de ella, importantísima, duró solamente 14 días! |
“El Rev. Monseñor González Arocha, distinguido patriota”... ...“nos aclara que las fuerzas de Maceo se fraccionaron cerca de Alquízar del 5 al 6 de Enero, tomando el Caudillo el rumbo al Norte, y al Sur las columnas mandadas por Bermúdez y Cayito Alvarez, que fueron, por tanto, las primeras que penetraron en la provincia Pinareña entre Artemisa y Majana. El Gen. Maceo se entretuvo en el Central Lucía, combatiendo, como veremos más adelante, lo que motivó se considerara el 8 de Enero como la fecha oficial del inicio de la invasión, en vez del 6.”... |
- Adolfo Dollero en “Cultura Cubana (Pinar del Río)”, Imprenta de Seoane y Fernández, La Habana, 1921, página 79: Diario del general Alberto Nodarse describe la entrada de la Invasión en la Provincia de Pinar del Río: |
...“Acerca de las primeras semanas de operaciones en Vuelta Abajo, dejaremos la palabra al muy valiente general Alberto Nodarse, quien no difiere sustancialmente de lo que asienta el General Miró sobre la invasión de la citada provincia: |
“Así rezan los apuntes de la libreta de campaña del aludido general: |
“..."El día 8 (Enero de 1896) pasamos por Cangrejeras y Punta Brava, llegando hasta las playas de Baracoa, donde supimos que el enemigo se encontraba situado en el ingenio "Central Lucía". |
“"El enemigo rompió el fuego sobre nuestra retaguardia, sosteniendo ésta el combate hasta el mismo batey de la mencionada finca en donde el Sr. Perfecto Lacoste, dueño del Central, dio pruebas de su serenidad. |
“"Las ventajosas posiciones que ocupaba la columna española, impidieron que se formalizase la acción. En vano estuvimos esperando el avance de los españoles a corta distancia del Ingenio, lugar elegido para que pudiese cargar nuestra caballería. |
“"Acampamos en Vergel (Provincia de Pinar del Río)” |
- Emeterio S. Santovenia en “Un Día Como Hoy” de la Editorial Trópico, 1946, páginas 21-22 nos describe los acontecimientos del 8 de Enero de 1896 en Cuba: |
“-General: he oído decir a los del cónclave autonomista que si usted pasaba el estrecho de Mariel sería más grande que Aníbal. |
“-Yo no sé dónde está esa angostura de las tormentas, pero deme mañana por situado en Pinar del Río. |
“El diálogo había sido breve, brevísimo, pero expresivo hasta no más. Apenas fueron algunas otras las palabras de despedida cruzadas el 8 de enero de 1896 entre Perfecto Lacoste y Antonio Maceo. Era un singular cambio de impresiones. Ambos personajes resultaban en aquella hora histórica eximios servidores de Cuba. Lacoste estaba ofreciendo prueba plena de su amor a la independencia y a las libertades patrias. Ni su concurso personal, con el de la ejemplar compañera de sus días, regateó a la Revolución, arrostrando el doble peligro de las balas y la inquina españolas. Maceo -de antemano lo reconocían sus adversarios- iba a poner fuera de toda duda su condición de gran capitán, título extraordinario conquistado en defensa del suelo nativo. |
“Seguro se hallaba el Lugarteniente de que no le fallarían los cálculos en que se basó para anunciar a Lacoste su próxima entrada en territorio pinareño. Aún anduvo corto el caudillo en su aseveración. No fue menester aguardar al día siguiente para ver satisfecha su categórica esperanza. La jornada del 8 de enero de 1896, iniciada marcialmente bajo la metralla española, quedó rendida en suelo de Pinar del Río. La columna invasora, penetrando en la región occidental tenida por baluarte inexpugnable de los servidores de la Colonia, consumaba una proeza más y ponía otra vez al descubierto la impotencia irremediable de los enemigos de la República. |
“Los hechos que iban a desarrollarse inmediatamente eran los encargados de mostrar cuan caprichosos e injustos resultaban a un tiempo los vaticinios de los integristas que contaban con la adhesión absoluta de Vuelta Abajo y los temores y recelos abrigados por los patriotas que ignoraban que era iluminada desde mucho antes la conciencia de los pinareños. Las predicaciones de Martí habían tenido magníficos y eficaces instrumentos en las comarcas del poniente cubano. Hombres y mujeres vivían en la campiña vueltabajera poco menos que consagrados a esparcir la simiente de la redención. Los acontecimientos guerreros casi once meses atrás iniciados en la tierra oriental invitaban de continuo y con buen éxito a sentir hondo y pensar alto, fija la vista en la salud de Cuba, en el nacimiento de la República, en el imperio de la justicia. Cuando sólo faltaba el esfuerzo superior capaz de proporcionar vigor y unidad a las ansias patrióticas de los occidentales, en el instante en qué llegaban a su colmo los anhelos de estos servidores de la Revolución, Maceo, el conductor de la Invasión, penetró en Pinar del Río con el título, que sus enemigos le adjudicaron, de nuevo Aníbal.” |
• 1845 - |
- Circular para que encontrada una carretada conducida por personas de color, sin que le acompañe hombre blanco, en clase de capataz, se le imponga a su dueño la multa de diez pesos. |