Calendario Cubano - Aeropuerto José Martí, Rancho Boyeros, La Habana, Cuba
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El 26 de febrero en Piscis
Piscis

Cuba, en el Capitolio Nacional, La Habana, Cuba.
Cuba
Así es Cuba
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José Martí, Apóstol de Cuba
José Martí

General Antonio Maceo
Antonio Maceo


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Iglesia de las Mercedes en Camagüey
Iglesia de las Mercedes
Camagüey

Iglesia de Jovellanos
Jovellanos

Iglesia de Mariel
Mariel
26 de Febrero
26 de febrero en el Aeropuerto José Martí en Rancho Boyeros, La Habana, Cuba.
Aeropuerto José Martí en Rancho Boyeros, que da servicio a La Habana

• Santos católicos que celebran su día el 26 de febrero:

- En el Almanaque Cubano de 1921:

San Néstor, Santos Faustino, Víctor y el beato San Juan de Ribera, confesor y San Alejandro, mártir

- En el Almanaque Campesino de 1946:

Santos Néstor, mártir, Faustiniano y Víctor, confesores


Guije.com - estudios en la cultura y la historia de Cuba El 26 de febrero en la Historia de Cuba

• 1896 -

- Las fuerzas de Antonio Maceo tienen fuego con una columna española, mandada por el Teniente Coronel Aldea, del batallón de Valencia, entre Cidra y Guanábana. Más tarde las fuerzas cubanas acampan en la finca Carmen, línea divisoria de La Habana y Matanzas.

- José Miró Argenter en “Cuba Crónicas de la Guerra (La Campaña de Occidente) - Tomo II: Segunda Edición” de la Editorial Lex, 1942, páginas 95-96 describe los acontecimientos del 26 de febrero de 1896 en la Historia de Cuba:

   “Como en el día anterior, se levantó el campamento al amanecer, a fin de atravesar en las primeras horas de la mañana la línea férrea de la ciudad a Jovellanos. Por el camino tuvimos confidencias de que algunas fuerzas españolas estaban emboscadas en las cercanías de Ibarra; pero reconocido el terreno, no se advirtió la presencia del enemigo. Siguiendo la marcha, con las precauciones necesarias, al cruzar la segunda línea, entre Guanábana y Cidra, se oyeron los pitazos de un tren, y poco después los españoles rompieron el fuego sobre nuestro flanco derecho; la columna estaba atrincherada en unas cercas de piedras. Desplegadas nuestras fuerzas en la misma línea férrea, se esperó el avance de los españoles, pero éstos permanecieron firmes en sus magníficas posiciones, por lo que se dispuso continuar la marcha, y sin otra peripecia hicimos alto en una finca llamada Carmen de Hernández, en la línea divisoria de Matanzas y Habana.

   “Con noticias de que el brigadier Aguirre se encontraba en Cayajabo desde la noche anterior, se despacharon correos para que esperara en aquel lugar el paso de Maceo a la provincia de la Habana. El general Aguirre, que como se ha dicho anteriormente, había desembarcado en Santiago de Cuba en Noviembre de 1895, se encontraba ya al frente de un regimiento de caballería, bien equipado y de aspecto marcial. Fue el general Aguirre en la contienda de 1868 un oficial muy distinguido del arma de caballería; era hijo de la ciudad de la Habana y estaba muy bien relacionado en toda la provincia. En la época de la propaganda separatista, por los años 1893 y 1894, fue adalid incansable, y junto con Sanguily, Enrique Collazo y Juan Gualberto Gómez preparó la rebelión en las comarcas de Occidente, de acuerdo con Martí y los demás centros de actividad que existían en el país. Apercibido el general Calleja de que la revolución estaba al estallar, el 23 de Febrero de 1895 mandó prender a Aguirre en los momentos en que se disponía a ocupar el puesto de antemano designado permaneció en prisión durante algún tiempo, y al recobrar la libertad marchó para Nueva York, en donde alistó una pequeña expedición que lo trajo nuevamente a las playas de Cuba, junto con otros compañeros expatriados. El ideal militar de Aguirre era combatir en la provincia de la Habana, y todos sus anhelos se cifraban en reunir una brillante tropa de caballería, su arma predilecta, para resarcirse del tiempo que permaneció cautivo: nobles propósitos que vio colmados en breve.”


• 1895 -

- Jagüey Grande y el pueblo de Ibarra cooperaron con su sangre a la guerra independentista que comenzaba, teniendo el primer encuentro con las tropas españolas en el potrero “Yuca” del barrio López, siendo capitaneados por el doctor Martín Marrero, auxiliado por hijos de este pueblo. El mayor general Mario G. Menocal, de este pueblo, también formó ese día en la santa causa del pueblo cubano.


Parque, Monumento a las Madres e iglesia de Jagüey Grande, Cuba.
Parque, Monumento a las Madres e iglesia de Jagüey Grande
La Cubanidad en la Literatura Cubana en Damisela

• 1869 -

- Abolición de la Esclavitud en Camagüey.

Emeterio S. Santovenia en “Un Día Como Hoy” de la Editorial Trópico, 1946, páginas 119-120 nos describe los acontecimientos del 26 de Febrero de 1869 en la Historia de Cuba:

   “Entre los acuerdos adoptados por los camagüeyanos a poco de haber proclamado en su territorio, el 4 de noviembre de 1868, la independencia de Cuba, se hallo el de constituir un Comité Revolucionario, encargado de encauzar la guerra. Cuando se decidieron a continuarla a todo trance, rechazando las proposiciones de paz procedentes del conde de Valmaseda -nunca trono con más oportunidad y eficacia la palabra viril de Ignacio Agramonte- eligieron a Salvador Cisneros y Betancourt, Ignacio Agramonte y Loynaz y Eduardo Agramonte y Pina para integrar el Comité Revolucionario.

   “Camagüey sostuvo en el común esfuerzo de los patriotas la tendencia democrática apasionadamente. Desde los primeros momentos, lejos de poner en manos de un solo hombre la dirección de todos los intereses y asuntos de la región, se ocupo en organizar un triunvirato de eximios ciudadanos.

   “Camagüey no se contento con darse una vez instituciones capaces de nobles empresas. Procuro marchar de concierto con los tiempos y las cosas. Así se vio como, no cumplidos los dos meses del desembarco en La Guanaja de los expedicionarios de la goleta Galvanic, comandados por el general Manuel de Quesada, del propio Comité Revolucionario partió una idea altamente democrática y previsora. Puesto que el territorio insurreccionado contaba con nuevos y más numerosos elementos, debía conocerse la opinión de todos acerca de los hombres en quienes depositaban su confianza. El Comité Revolucionario resigno sus poderes. Hubo elecciones. La mayoría favoreció a Salvador Cisneros, Ignacio Agramonte, Eduardo Agramonte, Antonio Zambrana y Francisco Sánchez Betancourt. Los representantes del pueblo pasaron a ser cinco, y, fuera por esta razón, fuera por otra de parecida índole, el organismo de tal suerte creado por los sufragios tomó el nombre de Asamblea de Representantes del Centro.

   “La Asamblea de Representantes del Centro se dio prisa en iniciar labor útil y levantada. Lo fue desde luego su decreto de 26 de febrero de 1869. Por él quedó abolida en el territorio sometido a la jurisdicción de la Asamblea la inhumana institución de la esclavitud. Los Representantes declararon en el expresivo cuanto lacónico preámbulo de su acuerdo que, habiendo sido traída la institución de la esclavitud a Cuba por la dominación española, debía extinguirse la primera con la segunda. Además, ellos tuvieron en cuenta principios de justicia y creyeron con razón hablar en nombre de la libertad y del pueblo.

   “El acuerdo de abolición de la esclavitud adoptado por la Asamblea de Representantes del Centro cortó el mal de raíz, pues creó aquella novedad sin atenuaciones de ninguna especie. Fue sin duda más amplio y explícito que el decreto dictado por Carlos Manuel de Céspedes en Bayamo el 27 de diciembre de 1868. Acuerdo y decreto estuvieron inspirados en el mismo criterio de libertad y justicia. Mas resultó asimismo innegable que los camagüeyanos se dirigieron con menos temor y menos vacilaciones a la consumación de la trascendental medida. El acuerdo de la Asamblea de Representantes del Centro constituyó una verdadera conquista revolucionaria.”


• 1866 -

- Real Orden que crea el Municipio del Mariel.

- Fundación del Municipio de Jovellanos (en homenaje a la memoria del literato español Don Gaspar Melchor de Jovellanos), en el entonces partido de las Jíquimas, con sede en el poblado de Bemba. El municipio comenzó a funcionar el 1º de julio de ese mismo año. Por Decreto del Gobernador General el 13 de septiembre de 1870 le fue puesto el nombre de Jovellanos a Bemba.


• 1855 -

- Centralización de todas las oficinas y ramos del Gobierno político.



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Última Revisión: 1 de Septiembre del 2008
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