8 de Julio en el Calendario Cubano
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El 8 de julio en Cáncer
Cáncer

8 de Julio
8 de julio - Casa Blanca, La Habana.
En Casa Blanca, La Habana

• Santos católicos que celebran su día el 8 de julio:

- En el Almanaque Cubano de 1921:

San Procopio, mártir y Santa Isabel, reina de Portugal

- En el Almanaque Campesino de 1946:

Santa Isabel, reina de Portugal; Santos Eugenio, papa y Procopio, mártir


• Natalicios cubanos:

Rosado, Pío: -Nació en Santiago de Cuba el 8 de julio de 1842 y falleció (fusilado por los españoles) el 7 de igual mes de 1880. En su ciudad natal ejerció el magisterio hasta que estalló la revolución de Yara, a la cual se incorporó y durante ella tomó parte en importantes acciones y comisiones, como ir personalmente a la capital de Oriente en nombre del general Mármol a tratar con el gobernador español sobre el canje de prisioneros. En la Guerra Chiquita vino en la expedición del general Calixto García y oculto en un potrero fue delatado por un señor. El comandante español Encinas se presentó a Rosado de paisano diciéndole que iba a proporcionarle una escapatoria. Y así engañado fue preso y fusilado en Bayamo, muriendo al grito de ¡Viva Cuba Libre! Bacardí escribió un libro sobre este patriota.


Guije.com - estudios en la cultura y la historia de Cuba El 8 de julio en la Historia de Cuba

• 1578 -

- Riqueza y Penuria.

Emeterio S. Santovenia en “Un Día Como Hoy” de la Editorial Trópico, 1946, páginas 385-386 nos describe los acontecimientos del 8 de Julio de 1578 en la Historia de Cuba:

   “La producción cubana se halló supeditada en la segunda mitad del siglo XVI a las vicisitudes inherentes al proceso de reorganización a que fue sometida la vida colonial. La vuelta a la actividad fecunda requería esfuerzos extraordinarios, superiores a los recursos con que la Isla contaba al cabo de una profunda depresión económica. Los hombres que continuaron la tarea de incorporar a Cuba a la civilización occidental se encontraron frente a limitaciones que sólo podían vencer a través de muchas dificultades.

   “El problema del trabajo resultaba grave. Este factor esencial de la producción sufrió la quiebra proveniente de la falta de braceros. Los blancos, sobre ser pocos, seguían inclinados a aprovecharse del esfuerzo material ajeno. Los cobrizos, por su escaso número y por su flaqueza, casi nada rendían a la clase dominadora. Los negros, mayormente los esclavos, eran los llamados a resolver la cuestión. Del aumento de esclavos, logrados con irregularidad y frecuentemente por medio del fraude, dependía por desgracia el auge de la producción.

   “La minería no recobró la importancia de los años de la conquista y de los que la siguieron inmediatamente. Esta riqueza natural se halló limitada a lo que la mano del hombre recogía en los lavaderos de oro: la actividad humana se desarrollaba en el suelo, no en el subsuelo. Aun así, el trabajo era difícil y agotador. Hubo momentos de la segunda mitad del siglo XVI en los que los españoles de Cuba se prometieron cuantiosos ingresos provenientes del oro entrevisto en Bayamo y Baracoa. En 8 de julio de 1578 el gobernador Francisco Carreño informó a Felipe II que Cuba era la isla más rica en cobre, hierro y oro, pero añadió que la penuria de sus habitantes era grande porque los esclavos costaban mucho. Las esperanzas cifradas en los yacimientos de cobre de la región oriental de la Isla luchaban con la ausencia de medios eficaces para la extracción y el laboreo de los minerales.

   “El cultivo de cereales, legumbres, tubérculos, frutas y hortalizas estaba en manos de gentes desvalidas, que no podían deparar mucho vuelo al aprovechamiento de estancias o sitios de labor. La cría de aves de corral pasaba por igual pobreza. Sobre ser reducidos los medios de que disponían los pobladores de Cuba para hacer avanzar esos renglones de la producción, se encaraba el frecuente peligro de los huracanes, que malograban cosechas, derribaban construcciones y causaban otros daños que se traducían en escasez y miseria en una colonia cuya existencia pasaba por difícil período de reorganización.

   “La economía cubana en la segunda mitad del siglo XVI sólo daba señales de algún bienestar en la ganadería. Las flotas consumían carnes de la Isla. Esto armonizaba con la situación políticosocial del país. Cuba había pasando de la condición de incipiente colonia a la de presidio sostenido para seguridad y servicio de los intereses de España en Tierra Firme. La fortaleza militar que era la Isla podía guardar riquezas en el suelo y en el subsuelo, pero quienes la habitaban sufrían penuria.”



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Última Revisión: 1 de Abril del 2008
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